Pánfilo en terapia, Gorki en la Yuma, Juanes, Bosé y bulto en el Nacional de La Habana, el de Vigilia mambisa alquilando la aplanadora para performance que será televisada urbi et orbi, los envíos postales, ¡los envíos postales!…
En definitiva, la «revolución» convertida en tediosa, por repetida y entonces siempre predecible, álgebra.
Eso me espera cuando me asomo a los periódicos salido del Asador de Aranda.
Ay, mamá, la cocina castellana. ¡Si el destino de eso que llaman Cuba se cociera en los pucheros donde la de Ávila encontraba a Dios! La humildad del horno, la ternura de la carne, los granos de arroz puntuando la morcilla de Burgos, la copa de sublime Yllera.
Si Cuba fuera por fin solomillo firme en lugar de esponjoso vol-au-vent, entonces…Bah…
Volvamos a lo importante: recuerden que el domingo hará calor, así que no olviden llevar sombreritos al concierto blanco…
Hmm… Plaza de la Revolución, sombrerito, Castilla: otra vez el álgebra y el tedio. Ya Korda sacó esa cuenta con su Leica: «El Quijote de la farola»
De contra:
Atiéndase y sígase al blog de Rafael Rojas: Libros del Crepúsculo. Un auspicioso comienzo para este recuento de sus lecturas.